Entradas

Mostrando entradas de septiembre, 2021

Calentamiento emocional

Imagen
Caen gotas de lluvia del cielo, y los cantautores dirán que está llorando, los poemas que le han roto el corazón y los meteorólogos que es consecuencia del cambio climático. Yo, sinceramente, ya no sé qué pensar desde que te fuiste, pero sé que no los creo. No los creo porque creamos lo que creemos, y ninguno de ellos te menciona a ti, y a ti te creí aunque no pudiera crearte. Quizá por eso siga sintiendo que fui yo quien no logró formar parte del puzle; que las piezas encajaban y lo que desencajaba eran todas mis versiones, todas las formas que adquirí para adaptarme a tus recovecos, todas las personas que fui por ti antes de perderme a mí misma en el proceso. Cada uno lo expresa a su manera, pero ninguno habla de los cambios emotivos del amor. De cómo tus suspiros son gases nocivos para mi capa de ozono, cuando soplan a otras bocas que no son la mía. Nadie habla de cómo el corazón también se puede descongelar, e inunda el interior de una persona de tendencias vacías. Ni de cómo calie...

Venus (parte 2)

Imagen
Te hice la carta astral y vi que teníamos las estrellas a nuestro favor desde el momento en que nacimos, y tú todavía no lo ves. Que el cielo nos quiso ver crecer juntos, y tú preferiste el desdén. Contábamos con cientos de sueños compartidos, con insomnio común (y solo junto al otro) y más argumentos para defender nuestras posturas que lengua para resolverlo en un beso. Y yo tuve más labia que ganas de besarte aquella última vez. Y puesto que hay cosas que no cambian nunca, quizá jamás lo llegues a saber. Éramos Venus retrógrado, llegando tarde al amor como quien pisa una estación de tren cerrada años atrás. No solo dejamos pasar el viaje, sino que habíamos visto marcharse una vida juntos sosteniéndonos la mano (quizá por miedo a soltarnos y avanzar, por miedo a dejarnos ir del otro), y no importó en el momento lo que hoy dolerá para siempre. Dejamos ir nuestra oportunidad por rozarnos un rato más, y nos está costando la vida. La vida juntos. La felicidad. Ahora, transito ese mismo Ve...

The Chariot

Imagen
Me enamoré de ti como quien le echa una carrera al tiempo: sin esperanza alguna de ganar la partida. Te sonreí como si te trataras de todo foco de luz existente, y aposté por ti más monedas que las que han podido cobijar jamás todas las fuentes del mundo. Y, en este caso, quien habla de monedas, habla de sentimientos. Mi pequeño obsequio de la eterna primavera, todavía te veo cada vez que cierro los ojos. Sigues espantando las pesadillas cuando me visitas, y yo espantando a todo aquel que ose manchar tu nombre. Me lavo la boca con jabón tras besar a otros, para que no lo notes y a pesar de que escueza en la herida (también, muy a mi pesar). Convertiste tus ojos en mi color favorito; tu voz, en esa melodía que no logro sacar de mi mente. Ahora lloran por mis poemas, y yo por ti; porque tú nunca me hiciste derramar lágrima alguna y, en respuesta, te perdí. Mi segundo pequeño amor, fallé en no cuidarte mejor; en no tener la paciencia de regarte hasta que lograras florecer. Y yo que solo m...